"Libérate" es el titulo de la canción, todo un himno, con la que salian al escenario del "Oasis" el 16 de octubre de 1985, Antonio Amaya y Rafael Conde "El Titi". Interpretes de copla y canción española aterrizaron en Zaragoza en pleno declive de su carrera musical. En una de la imagenes, son entrevistados por el periodista Mariano Gistain
Rafael Conde se inició a principios de la década de los 60, siendo un adolescente. De la mano de la Perla de Cádiz y los Hermanos Toronjo, nos consta que interviene en el sevillano Cortijo El Guajiro ubicado entre Los Remedios y Triana, concretamente el Domingo de Resurrección con un espectáculo continuo de flamenco y baile clásico y español que se prolonga hasta los días de la Feria de abril sevillana. Los temas del mismo tenían música del desaparecido Maestro Moradiellos. Corría el año 1961.
Dos años más tarde, grabaría sus dos primeros discos que contenían los siguientes títulos: Garrotín con twist, Soy un calé 'cumplío', No me llames Titi, Que nunca muere, Caramba…Carambita, Mi barquito de papel, Gitano colorines y Mi flor de romero.
Dos años más tarde, grabaría sus dos primeros discos que contenían los siguientes títulos: Garrotín con twist, Soy un calé 'cumplío', No me llames Titi, Que nunca muere, Caramba…Carambita, Mi barquito de papel, Gitano colorines y Mi flor de romero.
Antonio Amaya nació en Jaén y desde niño, tuvo clara su vocación de convertirse en artista. En 1947, y por esta razón, se marcha a Barcelona dónde comienza a trabajar en un espectáculo de variedades. En ese mismo año, firma contrato discográfico con la compañía del Gramófono Odeón para la que graba sus primeras creaciones escritas por el Maestro Algarra, entre las que podemos citar el pasodoble Doña Luz de Lucena, la marcha Yo quiero estar a tu vera, el garrotín El gitano Cundí o la zambra La Medallona. En esta misma ciudad, llevaría al teatro el espectáculo Bronce y oro que finalizaría en marzo de 1947. En julio de 1950, tiene lugar en el Teatro Victoria de Barcelona, una función en homenaje a Antonio Amaya cuya empresa del mismo entrega el lazo de oro con motivo de celebrar dos años consecutivos de éxitos en la ciudad condal.Pero su mayor éxito llegaría en 1952 con un pasodoble original de Freire, García Cabello y Juan Solano: Doce cascabeles. A partir de aquí, su carrera será imparable. Le seguirían la marcha ¡Ay Infanta Isabel!, el Romance a Joselito, la farruca El bule-bule, la zambra-farruca La 'mare' mía, la rumba Sombrerito, sombrerito o el pasodoble La reina Juana.Montó numerosos espectáculos como primera figura, sobre todo en Barcelona, ciudad que tantos éxitos le había concedido al cantante. De aquí, pasó a montar espectáculos en los que él no actuaba, sólo hacía de empresario para así aunque supo retirarse a tiempo, no abandonar su vocación. (información extraida del blog "reminiscencias de la copla")
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